La profundidad de tu mirada
acallada en tus pupilas
amasa tórridas sensaciones
mientras ruge la mar en tu interior
Ella es resurrección de mis muertes
Pensaba yo que ya no había remedio
para la solitaria espera de los alegros
¡Cómo me mueve pensar que en
un determinado lugar estés!
y que seas la estrella que no se apaga
ni con la luz del día
pues tú eres alma mía
efigie silenciosa que aposenta
en los latidos de mi corazón
Vuela gorrión y arroja el aire
que respiras a mi mundo
que se ahoga mientras piensa
en el correr de los minutos
queriendo ser la que de tu mano va.
Caen gotas de lluvia y mojan mi pensamiento
Es buen alimento para los pastos
a ellos dedico mis momentos
Hay tantos pájaros queriendo aburrirme
mientras roban mi pan
que he dejado en la banca
y olvidé comer
Somos ahora huéspedes ellos y yo
de un parque que se humedece
mientras la garúa acaricia los suelos
De soslayo miro a los cielos
y me doy cuenta que no estás lejos
pues nos cubre el mismo firmamento.
Luz Ramírez
Derechos reservados
Colombia
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