Fría llovizna
El céfiro de tu aliento…
Violetas acurrucadas
Muerte viva y alada
Ahogando los sentimientos.
Sin brida el moho crece
En lo que fuera la carne
Bordan los sueños viejos
En empañados espejos
La hora de aquella tarde
Y soy légamo y no soy
Porque me he ido contigo
Allí donde reinan las sombras
Largas, finas, redondas
Mariposas del olvido.
La lápida que te nombra
Lo hace con un susurro
Y cae un nido de alondra
Sobre la espesa alfombra
Cuando suspiro profundo.
Y soy légamo y no soy
Porque florece mi vientre
A pesar de los pesares
De los bosques y los mares
Tu semilla, mi vertiente.
Frío metal tu cruz
Noche cerrada el ciprés
Sol que ya no existe
Vida inocente insiste
Desde la vida y después.
Rita Mercedes Chio
(Derechos reservados)
El céfiro de tu aliento…
Violetas acurrucadas
Muerte viva y alada
Ahogando los sentimientos.
Sin brida el moho crece
En lo que fuera la carne
Bordan los sueños viejos
En empañados espejos
La hora de aquella tarde
Y soy légamo y no soy
Porque me he ido contigo
Allí donde reinan las sombras
Largas, finas, redondas
Mariposas del olvido.
La lápida que te nombra
Lo hace con un susurro
Y cae un nido de alondra
Sobre la espesa alfombra
Cuando suspiro profundo.
Y soy légamo y no soy
Porque florece mi vientre
A pesar de los pesares
De los bosques y los mares
Tu semilla, mi vertiente.
Frío metal tu cruz
Noche cerrada el ciprés
Sol que ya no existe
Vida inocente insiste
Desde la vida y después.
Rita Mercedes Chio
(Derechos reservados)
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