13 junio 2014

Pueblo olvidado

Pequeño
Como las huellas
Que hacen de camino
Los molinos del horizonte,
Fantasías de plata
Mariposas herrumbradas
Alertas en la tormenta
En amoroso dialogo
Del viento con sus aletas.

Pequeño
Sueño a medio construir
Con el sol a cuestas
Impías historias
Inquietantes leyendas
Entrando por sus ventanas
A la hora de la siesta.

Galope y verbenas
El mosto de la vida
Se agria
De tanta espera.
Amanece
En llanto del recién nacido
Y la muerte no sorprende
Se encadena
En la periferia
De algún sueño
No parido.

Pequeño
Lomo encofrado
Cañas y madera
Encandilado por la luna
En noches de luna llena.
Pueblo mío
Almita en pena
Sin trenes y sin ríos
Con tan solo,
Pies descalzos
Bolsillos secos
Y dos profundas huellas.

Rita Mercedes Chio Isoird
Derechos reservados

2 comentarios:

Nicoletta Forni. dijo...

El poema es precioso, pinta muy bien esos pequeños pueblitos, abandonados por sus jóvenes que partieron en busca oportunidades laborales, cuando el tren que los unía con otros pueblos, dejó de pasar.

Rita Mercedes Chio dijo...

Muchas gracias querida Nicoletta Forni.